martes, 30 de octubre de 2007

La mañana despues

Mucha gente te observa
pero nadie te ve como yo,
lejos me siento,
y espero tu decision...
¡Te necesito!
necesito tu luz

De la sombra no puedo escapar,
es tarde para hechar el tiempo atras
es tarde para remediar,
creo q fui tonta al no pensar,
no me di mis impulsos
y actue sin amar

Tu no me ves pero me conoces,
Yo te amo mucho mas que antes,
eres mi abrigo en mis tristes noches
eres mi amor y todo mi orden,
eres mi consuelo y todo mi desorden

Estimandote, adorandote
esperando por ti
deseandote, sintiendote
queriendo ser nuevamente feliz,
acompañandote, exaltandote
No puedo seguir sin ti


Esta es la mañana despues
y mi alma miente esperando,
esta es la mañana despues
y mi alma esta acorralada
entre las sombras de mi cuarto,
esta es la mañana despues
y ni siquiera tengo ganas de levantarme
porque se q no estaras a mi lado otra vez,
esta es la mañana despues
y el tiempo gotea lejos
en lo mas profundo de mi ser

Todo esto lo escribo para ti
y todavia diria mas,
si pudiera poner dentro de las palabras
todo el sufrimiento de mi amor,
no el mensaje lamentar...
sabrias que estas pocas lineas que te escribo
son solo para decir: Te amo!

Esta noche estas palabras iran hacia ti
rezo porque las leas pronto,
Te esperare desde la primera luz del dia,
esperando ver tu radiante luz...
Sueño que me veras pronto
que te arrodillaras en la penunmbra,
me levantaras junto a ti hacia luz
y me diras: Te amo

Esta es la mañana despues...

-l- Mirka -l-

...T-T...

jueves, 25 de octubre de 2007

El Reencuentro del amor

En el balcón, un instante
nos quedamos los dos solos
desde la dulce mañana de aquel día,
eramos novios...
el paisaje soñoliento dormia sus vagos tonos,
bajo el cielo gris y la rosa del crepusculo otoño
le dije que iba a besarlo,
bajo sereno los ojos
y me ofrecio sus mejillas
como quien pierde un tesoro

Caian las hojas muertas en el jardin silencioso,
en el aire erraba aun un perfume de heliotropos;
no se atrevia a mirarme,
le dije que eramos novios
y las lagrimas rodaron de sus ojos melancolicos,
sus ojos tenues se cerraron;
se acerco a mis brazos
y como un niño que tiene miedo
se apoyo en mis brazos,
beso mi cuello con sus labios
y sus lagrimas calleron por mis hombros

El viento nos entregaba un ambiente magico
era una tarde helada en donde tu y yo estuvimos juntos,
me besaste con ternura y me hiciste prometer que no te dejaria,
y que al cerrar y volver a abrir tus ojos yo aun estaria
y me quedaria a vivir un momento hermoso...
juntos hasta el ultimo dia magico,
en donde nos casariamos y seremos al fin novios...

-l- Mirka -l-

sábado, 6 de octubre de 2007

Mi discurso... El Suicidio T-T

Buenas tardes profesora y compañeros presentes hoy les hablo a ustedes pero más que como entes con un cierto cargo, hoy les quiero hablar a sus almas, quiero que la escuchen, que se den cuenta que esta aquí, que es joven y libre, que quiere volar y soñar... ¡así es! Esta dentro de cada uno de ustedes. Es por ello que quiero advertirles de un peligro constante casi imperceptible y que nos damos cuenta de él, sólo cuando somos trastocados por la pena y el dolor.
Hoy les quiero contar una historia, más bien mi historia, les advierto de antemano que no es para nada una historia alegre... júzguenla ustedes mismos.

Es el aire el que nos da la vida, aspiramos el aire y recibimos el don más humano, el don de distinguir y seleccionar. Respiramos y nos humanizamos, pero se nos corta la respiración cuando no hay selección posible ante nosotros, se nos detiene el corazón y no sentimos asfixiados, ese detenimiento se asemeja a la muerte que no se selecciona ni distingue, es como si de un momento a otro te hubieras convertido en ave pero que ya no es capaz de volar por si misma, pues aunque lo intentes tus alas se extienden pero no quieren volar, ellas solo desean sentir el aire por última vez y caer al abismo para descansar de todo el dolor que carga su ser.
Hace dos años yo intenté suicidarme, si me preguntan el por qué debo confesar que pese al tiempo que ha pasado después de aquel momento, aun no encuentro los verdaderos motivos que me llevaron a tomar esa decisión, tal vez ese sea precisamente el punto de partida de todo, la falta de motivos para vivir, ese sentimiento de vacío y angustia entremezclados que no te dejan descansar, esa lluvia de problemas que no te dejan respirar, ese anhelo de felicidad que no se logra alcanzar, ese agobio de soledad, esa sensación de sentirse perdida en el mundo, saturada por recuerdos, sin fuerzas para seguir luchando y con sólo ganas de perecer. Durante ese tiempo me encontraba en una montaña rusa de estados anímicos que variaban entre alegría y tristeza. Entre las muchas circunstancias que pasaban por mi mente era el recuerdo constante de la muerte de un ser querido quien había ocupado desde siempre el rol de padre, éste fue mi abuelo, la falta de motivaciones, mi baja autoestima, el desprecio de los seres que amo, problemas de adaptación tanto en mi familia como en mis grupos de amigos a causa de mi cambio reciente en mi forma de vestir que terminaban casi siempre en humillaciones. Por ese tiempo me encontraba en un período de depresión poco perceptible ya que yo misma me preocupaba de no demostrarlo, pero en mi interior sentía una angustia que ni yo misma era capaz de explicar, un tedio, una tristeza, una intranquilidad, una conducta rebelde sin razón... me sentía enferma, sin apetito, lloraba sin tener motivos, no dormía bien, todo en mí era pesimismo y culpabilidad, y en mi interior crecían cada vez más mis deseos de muerte y a causa de esto, evidentemente se comenzó a elaborar un plan suicida... lo intenté varias veces, al principio no tenía la intención de morir, comencé sólo con hacer leves cortes en mis brazos, lo suficiente como para sentir dolor pero no lo necesario como para suicidarse, sólo lo hacia porque eso me entregaba una sensación de alivio y placer, era una forma de relajarme, de evadir los problemas, me sentía más liviana después de esos momentos, calmaba mi ansiedad, sólo pretendía autoflagelarme ya que una parte de mí pedía ayuda a gritos porque quería salir de ese trance, sin embargo, nadie lo percataba y esto hizo que todo fuera empeorando hasta que uno de esos tantos intentos fue más exacto, más profundo... corté mis venas hasta el punto de quedar inconsciente. No recuerdo muy bien que sucedió, sólo sé que mi hermana me ayudó, ella me salvó la vida y se lo agradezco profundamente. Hoy miro hacia atrás y me doy cuenta que no hay mejor motivo por el cual vivir que la propia vida, la esperanza por un mañana, el hecho de existir. Entendí que las leyes de la muerte se parecen a las leyes de la vida pero es sólo un parecido aparente, superficial. Podemos “hacer el muerto”, pero un muerto no puede hacer el vivo ni siquiera sobre la consistente superficie de la tierra, en el aire está la diferencia...

Cómo pueden ver la mente de un suicida no es fácil pero ustedes se preguntaran ahora, ¿qué es suicidio? El suicidio es aquella acción por la cual un apersona acaba con su propia vida. Es una conducta autodestructiva porque esa acción puede conducir directamente a la muerte o puede ser un intento de esta misma pero siempre existe una intención letal en su misma esencia. Las acciones autodestructivas como el fumar, beber en exceso, practicar deportes de alto riesgo, tiene como intención principal el placer, en cambio una persona que tiene intención de suicidio no busca el deleite sino acabar con el sufrimiento porque su visión de túnel no permite ver otras posibles salidas.

Para explicar mejor este tema y que ustedes me entiendan les voy a clasificar el estudio del suicidio en cuatro modelos: un modelo biológico; en donde las personas parecen tener cierta vulnerabilidad hacia el suicidio, presentan un descenso en los niveles de Serotonina y Dopamina. Según el modelo genético; el estudio de los árboles genealógicos confirma cierta transmisión genética. En el modelo psicológico podemos darnos cuenta que el suicidio es un homicidio contra uno mismo a causa del abandono vivido por los demás. La agresividad que siento hacia el entorno la dirijo hacia mí y por ello me suicido y el modelo sociológico nos dice que a cada sociedad le corresponde un número X de suicidios.
Aún no ha sido demostrado el carácter genético del suicidio, aunque se puede encontrar en varios miembros de una familia este tipo de conducta autodestructiva, lo que se ha interpretado como una predisposición genética a padecer determinada enfermedad en la que el suicidio es un síntoma principal.

La mayor parte de suicidios consumados es a partir de los 65 años pero ahora la tasa de suicidios juvenil se ha incrementado considerablemente entre los 15 y 25 años, que nos dice esto; que son cifras realmente alarmantes porque el suicidio va en ascenso y quien sabe si quizás mañana mismo uno de los presentes termina haciéndolo, quizás sea usted o usted, ya que si bien todas las personas tenemos problemas, no todos los enfrentamos de la misma forma.
Las enfermedades con mayor riesgo a cometer suicidio son la depresión, la esquizofrenia y el abuso de sustancias (alcohol y otras toxicomanías) Los síntomas relacionados con esta enfermedad son: el insomnio, el abandono del cuidado personal y el deterioro cognitivo.
Los adolescentes que intentan suicidio se caracterizan por estar más expuestos a situaciones familiares adversas, en mi caso una de las situaciones que me llevaron a cometer estos actos fue la muerte de mi abuelo... Para mí él era muy importante, era lo más importante que tenía, él era mi padre, mi amigo. Todavía recuerdo las tardes enteras que pasábamos juntos conversando, riendo, escribiendo, sobre todo los últimos años, ya que él estaba postrado en una cama a causa de una enfermedad respiratoria terminal. Aún puedo sentir el calor de sus abrazos, de cuando me hacia cariño en mi cabecita, cuando me enseñaba, cuando me cantaba, cuando reía, él me motivó a escribir. Aún recuerdo las tardes enteras que pasábamos juntos escribiendo, inventando pallas, refranes, poemas, canciones. Yo prefería pasar todo el día con mi abuelo antes que ir a una fiesta o estar con mis amigos, para mí compartir con mi abuelo era fantástico. Luego de que él falleció yo me sentí con mucha desesperanza, pena, tenía una conducta disocial, era muy impulsiva, hacía esfuerzos constantes por lograr adaptarme pero no lo conseguía, tenía ese sentimiento de perdida, de rechazo aún aunque los demás no lo hicieran, perdí los intereses en las actividades que anteriormente me despertaban, tenía solo deseos de morir...

Más bien, ahora les pregunto ¿Cuántos de ustedes no se han sentido así más de alguna vez? ¿Cuántos de ustedes no se han querido suicidar? ¿Qué pasa por sus cabezas en esos momentos? El suicidio para mí está mal, he aprendido que nunca es tarde para darse cuenta de la realidad y que lo mejor de todo no es dejarse vencer, sino afrontar, pero más que culpabilizar a un suicida, pregúntense por qué él o ella se sienten así, ¿Qué lo llevó a hacer o pensar en esas cosas?... Lo más probable es que se den cuenta que lo hace porque se siente que lo ha perdido todo, porque no tiene afecto. La solución está en nuestras manos, sólo debemos darle cariño, valorarlo y apoyarlo, entenderlo y porque no, abrazarlo.

El suicidio es la búsqueda de solución a un problema que genera sufrimiento pero el hombre con su equilibrio ha de ser capaz de afrontar las circunstancias adversas que le salen al paso. La vida es más o menos justa, más o menos injusta, mala o buena; la vida tan solo es. La vida puede parecernos dura e implacable, sobre todo a ese tipo de personas fracasadas, que en vez de afrontar un problema se sientan a lamentar su fracaso y se cierran en un círculo vicioso. Es inútil maldecir a la suerte, para luchar, se necesita saber como es el adversario, si no lo haces ya has perdido la batalla antemano.
Generalmente las personas que se suicidan son seres calificados de poseer un carácter fuerte pos sus semejantes, por haber intentado suicidio, todo tiene que ser como ellos quieran en el momento que lo deseen, y es por estos rasgos que se les atribuye la supuesta “fortaleza” pero estas personas evidentemente no tienen nada de ser fuertes, sino todo lo contrario, son muy débiles. Son personas presas de sus emociones e impulsos, manipulables, dependientes, tornadizos, timoratos y tratan de demostrar su fortaleza a través de la autoridad y la violencia. Por el contrario, el carácter fuerte es aquel que cuenta con diversas posibilidades adaptativas, ellos hacen en cada momento lo debido, meditan sus posibilidades y consecuencias y toman la mejor decisión evitando males mayores.

Entonces ¿Qué es lo que se les condena a los suicidas, el hecho de quitarse la vida o más bien el hecho de no saber vivirla? ¿Qué es lo que lleva a los suicidas a desear morir? ¿Es realmente ese sentimiento o es llamado de atención camuflado en una posible muerte? Que cada uno de ustedes juzgue por su cuenta.

El suicidio es la solución más rápida, más insulsa y más débil que un ser humano puede llegar a cometer, es una actitud de ambivalencia en donde usted desea vivir y morir a la vez, con la diferencia de que uno de esos sentimientos surge con más fuerza.
El suicidio es un acto de comunicación interpersonal con “pistas” a modo de señales que ha ido dejando el ejecutor y la mayor de las causas que nos hacen llegar a esta situación, es la ausencia de vida más que los acontecimientos de esta misma.
Se considera que por cada adolescente que comete suicidio lo intentan cerca de trescientos y de cada diez personas que se suicidan, nueve de ellas dijeron claramente sus intenciones suicidas y la otra la dejo entrever. Esto nos dice que el hombre debe aprender a adaptarse, debe aprender a salir a adelante y no dejarse caer, debe sacar fuerzas de flaqueza, debe luchar, debe levantarse y volver a empezar.

La posibilidad de cometer suicidio siempre está latente en nosotros, es como un abanico ya que es el aire el que nos da la vida y en él está la diferencia. El abanico no es sólo un instrumento para mover el aire cerca del rostro, el abanico es una pistola al revés. Cuando la ignorancia la convierte en ametralladora el resultado puede ser nefasto. Acabar la vida con un abanico en nuestras manos es exponerse a la mantilla, al rosario de tu madre. Un suicida de abanico nunca debería dejarlo ver pero las personas que son fuertes tienen dos opciones al verlo: comérselo mientras expiran o tirarlo a la basura para atreverse y comenzar con una nueva vida.

Mirka 2.0....